*KISSIMMEE, Fla.* - Según informes de la policía, seis niños resultaron atropellados por un carrito de golf eléctrico en Kissimmee la noche del viernes. El incidente ocurrió alrededor de las 9:12 p.m., justo después del evento de Halloween "Boo on Broadway" en el centro de Kissimmee. Lo que comenzó como una atracción inofensiva para niños, un carrito de golf eléctrico adornado para parecer un tranvía, se convirtió en una situación aterradora.
"Realmente no sabía lo que estaba sucediendo hasta que empecé a acercarme y la gente señalaba debajo del carro", comentó Josh Windheim, quien trabaja en las cercanías. "Al parecer, uno de los niños quedó atrapado debajo del carrito mientras este avanzaba".
En un momento dado, un niño se encontraba en el carrito y este se deslizó hacia atrás, atropellando a seis niños, según la policía. Además, el carrito de golf también impactó contra un poste.
Windheim relató haber visto a un joven niño herido en brazos de su padre. "Pasó a mi lado, el niño tenía quizás año y medio, tal vez dos, y se le notaba la herida en su rostro; estaba lastimado".
El niño fue trasladado al Hospital Arnold Palmer por precaución.
Lo que hace que este incidente sea aún más impactante es que el vehículo involucrado en el accidente pertenecía al ex vicealcalde de la ciudad, el Sr. Félix Ortiz, y actualmente se utiliza como parte de la campaña publicitaria de Olga Cariño, candidata a alcaldesa de Kissimmee. Según fuentes que estuvieron presentes en el lugar del incidente, las llaves del vehículo se quedaron en posición de encendido, lo que plantea posibles cuestiones legales tanto para la ciudad como para las partes involucradas.
Este incidente ha conmocionado a la comunidad y plantea preguntas importantes sobre la seguridad en eventos públicos y el uso de vehículos en campañas políticas. Las autoridades locales continúan investigando el incidente y brindando atención a los afectados. Estaremos atentos a las actualizaciones sobre este trágico suceso.
Editorial de Ray Cruz: Desafíos de Seguridad en Kissimmee
La ciudad de Kissimmee ha enfrentado una serie de incidentes alarmantes en los últimos tiempos que plantean interrogantes serios sobre la seguridad y el funcionamiento de las fuerzas del orden. Es innegable que hemos llegado a un punto crítico en el que la tranquilidad de nuestra comunidad está en juego. Estos acontecimientos han expuesto una vulnerabilidad que no podemos permitir que persista.
En particular, el área del Downtown de Kissimmee se ha visto sacudida por accidentes, incidentes de violencia armada, peleas callejeras e incluso la circulación de vehículos sin placas de identificación. Estos incidentes, en su conjunto, pintan un cuadro desolador y preocupante de lo que está sucediendo en nuestro querido municipio.
Es crucial que los Comisionados de la ciudad y las autoridades pertinentes tomen medidas inmediatas para abordar estos problemas. No podemos permitir que Kissimmee se convierta en una ciudad asediada por la criminalidad y la inseguridad. La seguridad de nuestros ciudadanos debe ser una prioridad absoluta, y es imperativo que se trabaje incansablemente para restaurar la paz y la confianza en nuestra comunidad.
El fracaso de la Policía en contener estos incidentes y prevenirlos es un llamado de atención que no podemos pasar por alto. Necesitamos una estrategia sólida para abordar estas preocupaciones y devolver la seguridad a nuestras calles. Es hora de que todos los sectores trabajen juntos para garantizar un futuro más seguro y próspero para Kissimmee.
El tiempo para la acción es ahora. La comunidad merece vivir sin temor y preocupación, y es responsabilidad de nuestros líderes municipales garantizar que Kissimmee siga siendo un lugar seguro y acogedor para todos sus residentes. La seguridad no es un lujo, es un derecho fundamental que debemos proteger y preservar.