Científicos de la Universidad de Charité de Berlín y la Universidad de Cincinnati de Ohio (EE.UU.) realizaron un estudio para saber qué misterios oculta nuestro cerebro al momento de la muerte. La investigación fue llamada “Despolarización de la difusión terminal y el silencio eléctrico en la muerte de la corteza cerebral humana”.
Hallazgos
Analizaron los cerebros de algunos pacientes que habían sufrido paros cardíacos, accidentes de tráfico y accidentes cardiovasculares. Todo esto fue con previo consentimiento de los familiares. En el análisis se monitoreó la actividad neurológica de sus cerebros que no debían ser resucitados usando electrodos y matrices. En ocho de cada nueve de ellos se detectó un destello de las células cerebrales que intentaban detener la inevitable muerte.
Proceso
Las neuronas funcionan llenándose de iones cargados, creando desequilibrios eléctricos entre ellos. Para alimentarlos, las células beben del torrente sanguíneo, en donde consiguen oxígeno y energía química. Cuando el cuerpo muere y el flujo de sangre al cerebro se detiene, las neuronas privadas de oxígeno trabajan para recolectar los últimos recursos que le quedan. Las neuronas “se callan” al no recibir respuesta del cuerpo para alimentarse, y en su lugar usan sus reservas de energía esperando que el flujo sanguíneo vuelva; sin embargo, nunca llegará.
A medida que no recibe oxígeno, la actividad eléctrica se silencia en todo el cerebro, y es en ese instante cuando ocurre la muerte. Los datos que se obtuvieron del estudio muestran que es posible una resurrección celular.
Fuente: Ojo.com