Los grandes jugadores de Internet tendrán que pagar a las compañías de telecomunicaciones por asegurarse la calidad de sus conexiones. Eso ocurrirá en los Estados Unidos, pero el impacto tendrá un alcance global dada la universalidad de los servicios online. Por mucho que la Comisión Europea y los distintos gobiernos nacionales defiendan lo contrario, el principio de igualdad de la Red caerá como fichas de dominó tras el movimiento que se ha ejecutado en los EEUU.
Con tres votos a favor y dos en contra, el regulador sectorial de las telecomunicaciones estadunidense, la Federal Communications Commission (FCC), ha derogado la neutralidad de la red en aquel país. La mayoría republicana hizo valer la doctrina del presidente Donald Trump y acabó con la igualdad de trato online en aquel país. Vista la exigua diferencia en el escrutino, resultó decisivo el voto de calidad del presidente de la FCC, Ajit Pai, ex empleado de Verizon y designado el pasado enero por el propio inquilino de la Casa Blanca. Las consecuencias de la ruptura de Internet en los EEUU no se harán esperar en los próximos meses.
En la reunión, bautizada -irónicamente- por la propia Comisión con el nombre "Restaurar la libertad de internet", se han eliminado de facto las regulaciones de Obama a excepción de aquellas relativas a la transparencia, que únicamente supedita a las empresas a hacer públicas las decisiones que tomen sobre tráfico en las páginas web.
La decisión de la FCC significa que sólo las proveedores de contenidos y servicios de Internet que lleguen a acuerdos comerciales con las telecos disfrutarán de conexiones de calidad. Por el contrario, los jugadores de Internet que pretendan operar como hasta ahora posiblemente se encontrarán con retardos, bloqueos y penalizaciones en el uso de las infraestructuras. Más de un 1,5 millones de internautas se han movilizado en los últimos días en los EEUU en defensa de una red abierta e igualitaria para todos, pero también para no tener que pagar sobrecostes por determinados servicios online. Entre ellos destacan los videoclubs online (Netflix, HBO, Amazon, Youtube), que consumen la mayor parte de los recursos de red y que en adelante deberán pasar por la caja de los dueños de las redes para asegurarse la calidad de sus emisiones en streaming. Las dos mayores compañías de telecomunicaciones de Estados Unidos vienen celebrando el bolsa las nuevas reglas del mercado de Internet desde el pasado noviembre, con repuntes del 19 por ciento en Verizon y del 15,4 por ciento de AT&T. Sin embargo, ambas compañías cedían el 0,7 y 03 por cientos al cierre de esta edición. Los inversores daban por hecho desde el mes pasado que la FCC daría el control del negocio online a los dueños de las redes para que estas pudieran establecer acuerdos comerciales con gigantes como Google, Apple, Amazon, Facebook, Youtube, Spotify, Netflix o Whatsapp