El Ejercido israelí ha bombardeado esta noche objetivos de la organización integrista Hamás en Gaza, después de que milicianos palestinos de la franja han lanzado 3 cohetes contra territorio israelí en las últimas horas. Todos ellos han sido interceptados, pero ello no ha evitado la respuesta militar aerea israelí como es habitual.
La tensión creciente en Gaza y Cisjordania (Judea y Samària para los judíos), después de que EE.UU. ha reconocido a Jerusalén como la capital de Israel, ha dejado por la mañana el balance trágico de 2 muertos. En los dos casos, se trata de árabes palestinos abatidos por fuego israelí, ya en incidentes gravesen la frontera de Gaza.
Durante todo el día se habían produciido enfrentamientos en la Ciudad Antigua de Jerusalén con la policía, en las principales ciudades de Cisjordania y en la frontera de Gaza, en encontronazos contra efectivos del Ejército israelí. "Han aparecido protestas violentas en unas 30 localidades a lo largo de Judea y Samaria y en la Franja de Gaza", ha confirmado el Ejército en un comunicado.
Unos 3.000 árabes se han manifestado en total de forma violenta, quemando neumáticos, y lanzando cócteles molotov y piedras contra las fuerzas de seguridad. En Ramala, un millar de personas se han concentrado en el centro de la ciudad y varios centenares se han marchado después hacia un puesto de control militar en el norte, donde se han enfrentado con los soldados.
El punto más delicado era, sin embargo, Jerusalén, ya que desde ayer se temían enfrentamientos después de la plegaria del viernes en mezquita de Al Aqsa, en la explanada de las mezquitas (monte del templo para los judíos), que limita con el muro de las lamentaciones. Ello ha hecho que se reforzara la seguridad a toda la parte vieja de la ciudad, y un control estricto de manifestantes en la puerta de Damasco. Al final, se han evitado en este punto incidentes significativos.