Malas noticias para el presidente Donald Trump luego de una dura sentencia judicial que deja a ex su jefe de campaña, Paul Manafor tras las rejas.
Paul Manafort fue enviado este viernes a prisión preventiva al acabar con “la confianza” que había depositado en él la jueza del caso durante la instrucción de su causa, enmarcada en la investigación de la trama rusa.
Con esta decisión se pone fin al régimen de arresto domiciliario en el que se encontraba Manafort desde su entrega al FBI en octubre pasado y, ahora, el que fuera responsable de la campaña presidencial de Trump en 2016 tendrá que esperar en prisión a ser juzgado, según la orden registrada en el tribunal federal del Distrito de Columbia.
Durante una audiencia sobre la instrucción del caso, la magistrada, Amy Berman Jackson, comunicó a Manafort que había “abusado de la confianza” depositada en él.
Jackson ha optado por la prisión preventiva después de que la semana pasada el fiscal de la trama rusa, Robert Mueller, acusara a Manafort de obstruir a la Justicia por haber tratado de influir en las declaraciones de dos testigos en relación a su caso, lo que parece haber acabado con la paciencia de la jueza.
De esta manera, Manafort tendrá que esperar en la cárcel al comienzo del juicio en la corte federal de Washington, uno de los dos que tiene pendientes como parte de las pesquisas de la trama rusa.
El exjefe de campaña se ha declarado no culpable de los dos últimos cargos que se le han imputado: conspiración de obstrucción a la Justicia y de entorpecerla.
La semana pasada el fiscal especial de la causa, Robert Mueller, sumó estas dos acusaciones a la causa, que se suman a los múltiples delitos financieros y de conspiración que ya se le imputaban.
Mueller también atribuyó los dos nuevos delitos a Konstantin Kilimnik, el hombre de confianza de Manafort en Ucrania y vinculado directamente con el Kremlin, que se vio afectado por primera vez en la instrucción del caso.
Ambos trataron supuestamente de persuadir “de manera corrupta” a dos testigos entre febrero y abril para influir en los testimonios oficiales en relación al caso ante el tribunal federal del Circuito del Distrito de Columbia.
Este viernes, justo antes de conocerse la decisión de la jueza, Trump aseguró que Manafort “no tiene nada que ver con nuestra campaña”; posteriormente la calificó de “muy injusta” e ironizó sobre la misma: “No sabía que (Manafort) era el jefe de la Mafia”.
Manafort encara en los próximos meses dos juicios ante dos cortes en las que se ha declarado no culpable: Uno fijado para el 24 de julio en Virginia y otro que se iniciará el 17 de septiembre en Washington, apenas dos meses antes de las elecciones legislativas de noviembre.
Mueller investiga desde mayo de 2017, de manera independiente al Gobierno, los posibles lazos entre miembros de la campaña de Trump y el Kremlin, al que las agencias de Inteligencia acusan de interferir en los comicios presidenciales de 2016.
Manafort supuestamente trabajó entre 2006 y 2017 para Ejecutivos extranjeros, incluido el del prorruso del expresidente ucraniano Víktor Yanukóvich (2010-2014), y para oligarcas rusos, a los que ayudó a mejorar su imagen en Washington sin comunicárselo al Gobierno, lo que constituye un crimen.
El proceso contra él es producto de la investigación de Mueller sobre los supuestos lazos entre Rusia y miembros de la campaña de Trump, pero no está relacionada directamente con las actividades que desempeñó entre junio y agosto de 2016 como jefe de la campaña del ahora mandatario.
Manafort tuvo que dimitir tras descubrirse que había ocultado a las autoridades un pago de 12,7 millones de dólares que recibió por asesorar a Yanukóvich.
Desde que comenzaran las acusaciones contra Manafort, la Casa Blanca y el propio Trump han optado por distanciarse de su figura.
Por su parte el presidente Trump tuiteó que Manafort había recibido una sentencia “muy injusta”, a pesar de que no se había emitido ninguna condena formal.
“Qué sentencia tan dura para Paul Manafort, que ha representado a Ronald Reagan, Bob Dole y muchas otras personas y campañas políticas importantes”, tuiteó Trump. “No sabía que Manafort era el jefe de la mafia. ¿Qué hay de Comey, Crooked Hillary y todos los demás? ¡Muy injusto!”
Fuente: La Opinión