Los venezolanos seguirán pagando miles y millones de bolívares por casi cualquier cosa, al menos durante los próximos dos meses.
El presidente Nicolás Maduro anunció este martes que postergará como mínimo por 60 días la reconversión monetaria que iba a entrar en vigor el próximo 4 de junio.
El cambio buscaba quitarle tres ceros a la moneda local, el bolívar, y reemplazar los billetes por un nuevo cono monetario como medida para enfrentar la escasez de efectivo que vive el país en medio de una voraz inflación.
Maduro anunció su decisión de postergar la medida durante un discurso televisado, luego de que el presidente de la Asociación Bancaria de Venezuela (ABV), Arístides Maza, alegara que existía una "necesidad" de atrasar la medida por lo menos durante 90 días para, según dijo, permitir a las entidades financieras prepararse.
Maduro solicitó a su equipo evaluar la propuesta en las próximas 24 horas, aunque argumentó que prefería aplicarla en dos meses.
También se mostró a favor de que los billetes en circulación continúen vigentes tras la entrada de un nuevo cono monetario por un período a determinar.
La caída del bolívar
El billete de más valor actualmente en Venezuela es el de 100.000 bolívares, menos de US$0,5 en el mercado de cambio paralelo, el más usado en el país.
Durante el anuncio del cambio en marzo pasado, Maduro aseguró que la medida ayudaría a combatir la crisis económica actual que vive Venezuela, en particular la escasez de efectivo.
El país sufre además una hiperinflación que alcanza, según cálculos de analistas, el 100% mensual, la mayor del mundo.
En diciembre de 2016, y ya con una inflación galopante, Maduró ordenó el cambio de billetes agregando tres ceros que ahora retira. Entonces, el billete de mayor valor, el de 100 bolívares, pasó a ser sustituido por el de 100.000.
La retirada súbita del billete de 100 generó caos en algunas zonas del país y largas colas ante el Banco Central de Venezuela.
La moneda venezolana sufre una continua devaluación por la hiperinflación que el gobierno achaca a causas inducidas desde el exterior para desestabilizar al gobierno.
Los economistas críticos con el Ejecutivo aseguran que la inflación es producto de la ampliación de la base monetaria que además no tiene respaldo en papel moneda, cuya comercialización se ha convertido en un gran negocio.
Las comisiones por venta de efectivo pueden llegar a ser del 100% y algunos comercios rebajan sus precios para aquellos que paguen con billetes en lugar de tarjeta.
Fuente: BBC Mundo