Alberto, una poco común tormenta subtropical, se formó el viernes en el Golfo de México, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
En su boletín de las 11 de la mañana, los meteorólogos informaron que la tormenta estaba unas 55 milas al sur de Cozumel, México, y se movía hacia el norte noreste a 6 millas por hora, con vientos sostenidos de 40 millas por hora. Se espera que la tormenta pase cerca de la costa de Yucatán el viernes por la noche y siga rumbo norte durante al fin de semana, antes de tomar rumbo noroeste el lunes cuando se acerque a la costa de Estados Unidos, aumentando su intensidad y posiblemente convirtiéndose en un huracán.
Las fuertes lluvias se mantienen como la principal amenaza de la tormenta y se pronostica que en la región occidental de Cuba y Yucatán caigan entre 10 y 15 pulgadas de lluvia. En algunos lugares las precipitaciones pudieran lelgar a 25 pulgadas.
La Florida y la costa del Golfo de México deben prepararse para fuertes lluvias y la posibilidad de inundaciones; partes de la costa norte enfrenta el peligro añadido de mareas de tormenta.Esto es algo que no ocurre con frecuencia antes del inicio de la temporada de huracanes, que comienza oficialmente el 1 de junio, dijeron meteorólogos del Centro Nacional de Huracanes (NHC).
"Cuando toque tierra, se moverá con lentitud, de manera que puede haber fuertes inundaciones", dijo Dennis Feltgen, portavoz del Centro Nacional de Huracanes.
Los meteorólogos actualizaron la fuerza del sistema el viernes después que boyas locales y lecturas en embarcaciones indicaron vientos de mayor velocidad. Un sistema subtropical tiene los mismos peligros que una tormenta tropical —fuertes lluvias y vientos— pero no tiene un centro cálido. Además, los vientos fuentes se presentan en los bordes, en vez de en el centro.
Pero a medida que el sistema se mueve hacia el norte, se espera que la tormenta gane en organización.
"La tormenta ganará en organización, así que esperamos que se fortalezca", dijo Feltgen. "No se puede descartar que se convierta en un huracán.
Como el centro de la tormenta está tan desorganizado, pronosticar su rumbo con algún grado de precisión es difícil, dijeron los meteorólogos. La tormenta debe desplazarse hacia el norte durante las próximas 24 horas. En algún momento del sábado, se espera que el sistema se acelere y tome rumbo noroeste.
Está planeado que un avión cazahuracanes sobrevuele la tormenta más tarde este viernes.
Como el sistema está absorbiendo una gran cantidad de humedad del Caribe, es muy probable que el sur de la Florida tenga un fin de semana lluvioso.
"La humedad tropical en el sur de la Florida aumentará a partir de hoy y durará hasta el fin de semana", dijo Larry Kelly, meteorólogo del Servicio Nacional de Meteorología (NWS), con sede en Miami, el viernes por la mañana. "Esa es la principal preocupación", agregó.
Es posible que haya inundaciones en los condados Miami-Dade y Monroe después de semanas de aguaceros que en algunas partes han llevado los acumulados a dos y tres veces más que las cifras habituales de mayo. Los vientos con fuertes ráfagas y el mar picado podrían empeorar el sábado, con posibles tornados el sábado y el domingo. También se pronostican corrientes de resaca en ambas costas, dijo el NWS en Miami.
Hasta ahora no se han emitido avisos de inundación para el sur de la Florida, pero Kelly dijo que esto podrían cambiar. "Es algo que seguiremos monitoreando", dijo Kelly.
Fuente: El Nuevo Herald