Tras casi seis décadas gobernada por los hermanos Castro, Cuba se prepara hoy para tener por primera vez a la cabeza del Gobierno a una persona desvinculada sanguíneamente a la familia.
Ese dato -junto al hecho de que todo apunta a que el nuevo sucesor de Raúl Castro será el vicepresidente Miguel Díaz-Canel, un hombre de 57 años nacido después del triunfo de la Revolución en 1959-, hacen ya de por sí el proceso uno interesante, a juicio del catedrático Efraín Vázquez Vera, experto en temas de relaciones internacionales.
“No podemos esperar ver grandes transformaciones en este primer gobierno post Castro -que no es tan post Castro nada, porque sabemos que Raúl continuará siendo el jefe del Partido Comunista de Cuba (único legal en la Isla)-, pero sí creo que el gobierno de don Miguel dará continuidad a las reformas ya emprendidas por el presidente actual y eso es bien importante”, dijo.
Mencionó como ejemplo de los cambios propiciados por Castro la posibilidad a que los ciudadanos puedan tener propiedades privadas, el acceso al Internet, la liberación de remesas y apertura a la inversión extranjera.
“Que don Miguel esté desvinculado de ese apellido tan cargado como lo son los Castro, puede provocar una mayor apertura a que haya acercamientos con Cuba por parte de personas influyentes en Estados Unidos o a mayor intercambio de la isla con el exterior. Pero debemos ser realistas tampoco es como que lo que va a ocurrir es una aceleración de Cuba hacia una economía de mercado y democracia liberal”, agregó.
De otra parte, destacó lo “interesante” que es el proceso electoral del país hermano.
“En Cuba no hay elecciones presidenciales, sino que se eligen diputados que entre sí eligen al Presidente del Consejo de Estado, que es a su vez el Jefe de Estado y Jefe del Gobierno de Cuba”, explicó el profesor, quien agregó que los 605 diputados sí son elegidos por el pueblo.
Este proceso fue el pasado 11 de marzo, con la participación de 8 millones de votantes.
Poca confianza de cubanos radicados en Puerto Rico
Mientras, el proceso de cambio presidencial causa poco interés en el cubano Teodoro Mayo Suárez, quien se radicó en Puerto Rico en 1963, cuatro años después de la revolución.
“Fidel (Castro) fue un hombre inteligente, pero utilizó inteligencia para el mal por egoísmo... y honestamente, no creo que la situación vaya a cambiar porque Raúl no va a dejar a alguien que no siga el régimen castrista”, opinó Mayo, de 89 años.
Irene Mayo, su esposa, coincidió y rechazó que haya una visión de desarrollo para Cuba con un nuevo presidente.
“Raúl se retira, pero está detrás de todo... él va a seguir manejando la cosa. Dios quiera que se abran puertas, y me equivoque, pero eso no se va a ver”, expresó.
Según datos del Censo de 2010, en Puerto Rico hay sobre 17,000 ciudadanos cubanos.
En cambio, esa cifra debe estar fluctuando en 14,000, según cálculos hechos recientemente por la organización Cubanos Unidos.
Fuente:Primera hora.com