Estados Unidos y otros 20 países aliados de Reino Unido anunciaron el lunes la expulsión de decenas de diplomáticos rusos como respuesta al envenenamiento que sufrió en Inglaterra Sergei Skripal a principios de marzo.
Se trata de la expulsión colectiva más grande de funcionarios rusos en la historia, según aseguró el canciller británico Boris Johnson.
Más de 20 países se alinearon con el gobierno británico, con la expulsión de más de 100 diplomáticos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ordenó que 60 funcionarios rusos abandonen su país.
Por su parte, Alemania, Francia, Ucrania y otros países de la Unión Europea anunciaron también expulsiones de empleados del Kremlin. Y Canadá informó que cuatro diplomáticos rusos deberán salir de su territorio.
Tras la acción simultánea, Rusia dijo que responderá de forma "proporcional y simétrica" a estas medidas.
El Kremlin niega haber participado en el ataque contra Skripal y su hija en Salisbury, en el sur de Inglaterra.
Reacción del Kremlin
"Somos testigos de la gran campaña antirusa", respondió el ministro de relaciones exteriores ruso, Sergei Lavrov.
La vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, María Zakharova, por su parte, condenó a la UE por su "perversa interpretación de solidaridad" con Reino Unido.
Según reportó desde Moscú el periodista de la BBC Paul Adams, la acción coordinada para expulsar a decenas de diplomáticos rusos "no tiene precedentes".
"Es un momento significativo en la historia de la diplomacia. También es un gran momento para Reino Unido y sus esfuerzos por conseguir apoyo", dijo el corresponsal de la BBC.
Fuente: BBC Mundo.com