El alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, anunció la renovación del Fondo de Protección Legal de Chicago, que ofrece abogados gratuitos a los inmigrantes y refugiados y para el que se ha destinado 1,3 millón de dólares en 2018.
En un acto multitudinario por el primer aniversario de este programa de protección para inmigrantes el alcalde aprovechó para destacar la labor de los voluntarios
"Realizaron un trabajo increíble durante el último año para que las vidas de nuestros residentes estén protegidas y apoyadas", declaró Emanuel en un colegio comunitario de la ciudad.
A su lado, el congresista demócrata por Illinois, Luis Gutiérrez, dijo que Chicago debía estar orgullosa de la forma como trata a sus inmigrantes, ?con justicia y respeto?.
"Esta ciudad ha establecido estándares muy altos y ha decidido enfrentar las actitudes y políticas antiinmigrantes que vienen de la Casa Blanca y Washington", agregó el legislador, que esta semana anunció su retiro del Congreso después de 25 años y que baraja presentarse como candidato presidencial.
En su primer año, el fondo financió la formación de más de 400 voluntarios, realizó 700 seminarios de capacitación sobre derechos y atendió a unos 22.000 inmigrantes mediante consultas legales y representación en la corte.
El fondo es administrado por el Centro Nacional de Justicia para el Inmigrante (NIJC), de Chicago, que trabaja con ocho organizaciones vinculadas a las comunidades inmigrantes de la ciudad.
En la ceremonia fue mencionado un estudio realizado por la Universidad Syracuse, del estado de Nueva York, según el cual la cantidad de inmigrantes acompañados por abogados durante audiencias de inmigración en Chicago, aumentó del 30% en mayo de 2017 a 57% en agosto de ese mismo año.
"Y esto ocurrió durante un año donde nuestras comunidades enfrentaron una amenaza creciente del Gobierno federal", dijo Mary Meg McCarthy, directora ejecutiva del NIJC, quien informó que aproximadamente 150.000 residentes del área de Chicago no tienen papeles, y decenas de miles más están preocupados por su estatus migratorio.
El estatus de Chicago como ciudad "santuario" de indocumentados, vigente desde hace 33 años, ha sido atacado por el Gobierno federal, con amenazas de recorte de fondos del Departamento de Justicia destinados a la Policía.
Las órdenes ejecutivas del presidente Donald Trump, de no otorgar subvenciones a las ciudades que no colaboran con Inmigración, fueron bloqueadas hasta el momento en las cortes, en una lucha que, según dijo hoy Emanuel, continuará en defensa "del sueño americano" de inmigrantes y refugiados.