Florida registró este jueves 2,484 casos de COVID-19, un incremento de más de 500 casos comparado con el reporte final de casos registrado el miércoles.
De ese total, 2,359 son residentes de la península y 125 no lo son, pero se encuentran aislados en Florida.
Los fallecidos llegaron a 29, según las últimas cifras del Departamento de Salud de Florida.
El condado con el mayor número de casos sigue siendo Miami-Dade, donde 654 personas han dado positivo a la prueba de COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus. Las personas que han dado positivo en el condado tienen entre 3 y 99 años, según las cifras del departamento.
Solo 121 de los casos están relacionados con los viajes. A pesar de ser el condado con el mayor número de casos, nadie ha fallecido de la enfermedad en Miami-Dade.
El miércoles en la noche, la comisión de la ciudad de Miami votó para imponer un toque de queda desde este viernes. El toque de queda será desde de las 10 de la noche y hasta las 5 de la madrugada, medida que se mantendrá en vigor hasta nuevo aviso.
La policía podría detener e interrogar a cualquier persona en público durante este período de tiempo. Las excepciones incluyen a personas que van y vienen del trabajo, buscan servicios médicos y los que pasean a sus perros siempre que estén a no más de 250 pies de sus casas.
Homestead anunció que implementaría también un toque de queda durante las mismas horas.
Ya otras ciudades como Miami-Beach y Surfside han tomado medidas similares.
El alcalde del condado Miami-Dade, Carlos Giménez, pidió a los residentes que se mantengan en casa y “a salvo” de la pandemia del coronavirus.
Gimenez firmó una orden ejecutiva el jueves para asegurarse de que los residentes en el condado se queden en sus hogares ante la expansión del COVID-19.
Giménez aclaro a través de un tuit que no estaba usando el termino de ‘confinamiento obligatorio’ como han hecho otras ciudades porque ese termino lo reserva para “emergencias de corto plazo”.
Más temprano este mismo jueves, Giménez descartó imponer un toque de queda en el condado ante la acelerada propagación del coronavirus, tal como ha hecho la Ciudad de Miami y otras del sur de la Florida.
Giménez dijo en una entrevista con la emisora Actualidad 1040 AM que consultó con el Departamento de Policía del condado y esa agencia consideró que no es necesario porque las calles del condado “están tranquilas”.
“El toque de queda no. Hablé con el director de la policía esta mañana y le pregunté y me dijo que no. El condado, que en su mayor parte es residencial, está tranquilo. Y tiene equipos (de policías) que están supervisando las zonas que siempre han sido calientes”, informó
Los condados de Broward y Miami-Dade anunciaron ordenes de confinamiento obligatorio el jueves después de días de criticas de parte de lideres de ciudades en ambos condados.
En Broward 505 personas han dado positivo a la prueba de la enfermedad. En este condado el número de muertes por la enfermedad, reportado por el Departamento de Salud, quedó en tres a pesar de que una comunidad de vida asistida en Fort Lauderdale reportó tres muertes más de personas que dieron positivo.
El Dr. Alex Hsu, un internista de Margate, en Broward, tampoco fue contado en la cifra de muertos del condado. Hsu, de 67 años, falleció el miércoles y, según los informes, es el primer profesional médico del sur de la Florida en morir por COVID-19. Esto elevaría el número total de muertes de Broward a siete.
Estados Unidos es en este momento el país con el mayor número de casos confirmados de coronavirus.
De acuerdo con un conteo de la Universidad Johns Hopkins, el número de personas infectadas en el país superó el jueves los 82,000, con lo que rebasa los 81,000 de China y los 80,000 de Italia.
Este jueves fue el día con el mayor número de muertos en el país. Se registraron más de 230 muertes, elevando el número total de decesos a más de 1,180.
Los precios de las acciones volvieron a subir el jueves en la Bolsa de Valores de Nueva York debido a que un enorme paquete de ayuda por la pandemia de coronavirus se acerca a su aprobación en el Congreso estadounidense.
El avance se produjo incluso aunque la masiva escala de la crisis que afecta a la economía se hace cada vez más evidente. Casi 3.3 millones de estadounidenses solicitaron el subsidio por desempleo la semana pasada, superando un récord impuesto en 1982.
El índice S&P 500 sigue 22% por debajo del máximo histórico que impuso en febrero y los analistas prevén que habrá más noticias económicas alarmantes en los próximos días.
El proyecto de ley de rescate fue aprobado por el Senado el miércoles por la noche y se dirige a una votación en la Cámara de Representantes programada para este viernes.
Fuente: AP y El Nuevo Herald