El próximo domingo se disputa la final de la Copa del Mundo de Rusia 2018 y el enorme honor de ser el árbitro designado para este encuentro recayó en el argentino Néstor Pitana.
Pero independientemente de ese reconocimiento este colegiado pudiera se embolsarse una buena suma de dinero, aunque comparada con las grandes cantidades que hoy ganan los futbolistas no parezca una cifra tan alta.
Para cada árbitro el pago por participar en el Mundial es de unos $70,000, a lo que se le suma $3,000 por cada juego en el que sea juez principal; mientras los asistentes recibirán $25,000, más $2,000 por partido.
Pitana ha mostrado gran nivel y con la final será su quinto juego en Rusia con lo que se embolsaría $85,000.
El colegialo sudamericano trabajó en el Rusia-Arabia Saudita, México-Suecia, Croacia-Dinamarca y Uruguay-Portugal. En esos encuentros mostró 11 tarjetas amarillas y ninguna roja.
A pesar de poder contar con el VAR, esta será la Copa en que los colegiados ganarán más por sus servicios, después de percibir $34,000 en el 2010 y $50,000 en el 2014.
Si bien este es una buen salario para un ciudadano de a pie, luce una miseria de acuerdo a las ganancias de la FIFA y las de los propios jugadores a los que dirige, la gran mayoría millonarios.
En Rusia la FIFA tiene previsto embolsarse un monto récord de $6,400 millones y fácilmente puede pagarle el doble a los 36 árbitros y los 63 asistentes que prestan sus servicios en esta Copa del Mundo, por los que pagará en total apenas $4.5 millones.
Fuente: El Nuevo Herald.com