La tensión entre Estados Unidos y Rusia crece por la posibilidad de un ataque en Siria.El embajador ruso ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, advirtió este miércoles que no descarta la posibilidad de un conflicto armado entre su país y Estados Unidos, si Washington decide lanzar un ataque contra Siria.
"No podemos excluir ninguna posibilidad, lamentablemente, porque hemos visto mensajes bélicos salir desde Washington", afirmó el diplomático ante periodistas en la sede de la ONU.
Según dijo, los riesgos de una "guerra" son posibles. "La prioridad inmediata es evitar el riesgo de guerra".
Aunque luego trató de rebajar las tensiones y aseguró que se debería negociar y buscar una solución acordada, el diplomático ratificó que su país respondería por la fuerza ante una eventual intervención de Estados Unidos en el conflicto de Siria.
El Kremlin, por su parte, anunció que estableció un enlace de comunicaciones de crisis con la Casa Blanca para evitar "un choque accidental" entre los dos países, mientras agencias rusas informaron que el Ministerio de Defensa movió varios buques de guerra de puertos sirios ante la posibilidad de bombardeos
Pero ¿cuál es el origen de la preocupación por una eventual guerra entre las dos potencias?
Las trompetas de la guerra
La preocupación por un posible enfrentamiento entre Rusia y Estados Unidos revivió desde el miércoles, cuando el presidente Donald Trump dijo que Moscú debía "prepararse" porque los misiles que caerían sobre Siria serían "bonitos, nuevos e inteligentes".
Desde hace días, Washington valora una respuesta militar contra el gobierno de Bashar al Asad, luego del supuesto ataque con armas químicas contra la población civil de Douma que tuvo lugar el pasado 7 de abril.
Las armas químicas están prohibidas por las leyes internacionales y en varias ocasiones el gobierno sirio ha sido acusado de utilizarlas en las ciudades tomadas por los rebeldes durante el conflicto interno que lleva más de siete años.
Damasco y Moscú niegan el uso de estas armas y la atribuyen a campañas de Occidente para justificar una eventual intervención en el país del Oriente Próximo.
Aunque en un inicio Trump anunció que tomaría medidas ante el supuesto ataque a más tardar en 48 horas, el mandatario y sus asesores de seguridad nacional se reunieron nuevamente este jueves para discutir la eventual respuesta, aunque no se tomó una decisión final, según anunció la Casa Blanca.
Fuente: MSN.com