Donald Trump se preparará para un desafío de alto calibre, la cumbre histórica con el líder norcoreano Kim Jong Un, con un equipo diplomático sumido en el caos tras la abrupta salida de Rex Tillerson del Departamento de Estado, donde varios puestos clave siguen vacíos.
"Tillerson era favorable a conversaciones con Corea del Norte, y el presidente al aceptar hacer eso está haciendo en cierto modo lo que el secretario siempre ha promovido", dijo este miércoles el exembajador Stapleton Roy en un intercambio con periodistas en Washington.
En el pasado, Trump era más bien dado a regañar a su canciller por sus esfuerzos en favor de emprender negociaciones con Pyongyang sobre el programa nuclear y balístico norcoreano.
Tillerson, defensor de una diplomacia más convencional mientras el presidente se inclina en cambio por flexionar los músculos de Estados Unidos amenazando con "destruir totalmente" Corea del Norte, hacía sin embargo gala incluso la semana pasada, en su último viaje ministerial, de poder "crear las condiciones para negociaciones fructuosas entre dos partes muy diferentes".
"Todo el mundo sabía de las diferencias de opinión entre Trump y Tillerson. Eso socavó la capacidad de Tillerson de representar al presidente como secretario de Estado", estimó Abraham Denmark, director del programa Asia del centro de estudios Wilson Center.
Su sucesor designado, el director de la CIA Mike Pompeo, que parece estar alineado con el magnate republicano, podría por tanto resultar ser "un negociador más creíble frente a los norcoreanos", añadió.
Pero el tiempo apremia.
La Casa Blanca justificó el despido de Tillerson por la necesidad de que Trump tenga "su nuevo equipo listo antes de las discusiones con Corea del Norte", en un encuentro sin precedentes que tendría lugar a fines de mayo.
Sin embargo
, la nominación de Pompeo no podrá ser confirmada por el Congreso antes de abril. Hasta entonces, el subsecretario de Estado, John Sullivan, quien carece de envergadura política, será quien lleve las riendas del Departamento de Estado.
- Mala "reputación" -
A su alrededor, los actores escasean. La secretaria de Estado adjunta para Asia del Este, Susan Thornton, no ha sido aún confirmada por el Congreso porque Tillerson se tardó en imponerla ante los partidarios de la línea dura de la Casa Blanca. Queda entonces la pregunta: ¿La diplomática, favorable a las negociaciones, se entenderá con Mike Pompeo, considerado un "halcón"?
Al mismo tiempo, el representante especial para la política norcoreana Joseph Yun, uno de los pocos "canales de comunicación" entre Washington y Pyongyang, acaba de jubilarse y no ha sido remplazado.
Estados Unidos tampoco tiene embajador en Corea del Sur, aliado clave y artífice del giro diplomático con el Norte.
El académico y diplomático Victor Cha, desde hace tiempo considerado para el cargo, fue recientemente descartado luego de haber criticado la eventualidad, prevista según él por algunos en la Casa Blanca, de un ataque preventivo selectivo para persuadir a Kim Jong Un de renunciar al arma atómica.
"Actualmente en el Departamento de Estado son escasas las personas con la experiencia requerida para negociar con el Norte", estimó Roy.
"En Estados Unidos hay mucha gente capaz de participar en un proceso de negociaciones, pero no están en el gobierno. Eso depende de la manera en la cual se constituya el equipo" alrededor del presidente, agregó el especialista en Asia.
Trump, de su lado, no parece inquietarse demasiado por los problemas de recursos humanos de la diplomacia estadounidense. "Yo soy el único que importa", respondió hace meses a la cadena Fox sobre esas preocupaciones.
Pero a Stapleton Roy le preocupa que el presidente "aceptó participar en la reunión antes de fijar los objetivos" y que acudirá a la cita con Kim "con la reputación de no estar propiamente preparado sobre los temas" que debe manejar.
"Debe absolutamente mostrarle al mundo y a Estados Unidos que él se prepara seriamente para esta cumbre", dijo, apelando al mandatario a incorporar a sus opositores del Partido Demócrata en un esfuerzo "bipartidista".
Fuente AFP