Los cerca de 850 inmigrantes que sirven en el Ejército o que están esperando a recibir la formación básica para sumarse a filas no será deportados pese al final del programa DACA, que protege a los indocumentados llegados al país como niños de la mano de sus padres.
Tampoco están en peligro aquellos que se han licenciado ya como veteranos, según ha informado este jueves el secretario de Defensa, Jim Mattis, que dice haberlo acordado con la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen.
La única excepción atañe a aquellos que hayan cometido un delito grave o sobre los que pese una orden final de deportación emitida por un juez federal, ha añadido Mattis.
“No están en peligro de ninguna manera”, ha indicado Mattis a la prensa. “Siempre estaremos detrás de nuestra gente”, ha añadido.
Los soñadores que sirven en el Ejército se incorporaron a filas dentro de un programa conocido como MAVNI (Military Accessions Vital to the National Interest), que se puso en marcha en 2009 para reclutar a inmigrantes o refugiados en situación legal con formación médica o conocimiento de una lengua extranjera (español, chino, ruso, portugués, etcétera). A cambio, se les ofrecía acelerar los trámites de naturalización, de forma que pudieran obtener la nacionalidad antes de ser enviados a su destino. Unas 10.000 personas han sido reclutadas mediante este programa, y 1.800 se encuentran en proceso.
A finales del año pasado, el Pentágono paralizó el programa para revisar los protocolos de seguridad con efecto retroactivo, y dejó en el aire el futuro de los aspirantes en curso. En febrero, en un foro de MSNBC, el presidente, Donald Trump, aseguró que arreglaría la situación de aquellos inmigrantes “que planean entrar en el Ejército, que sean admitidos”. “Tenemos que ser muy cuidadosos”, añadió”, “pero la respuesta es que sería una circunstancia muy especial”, dijo al ser preguntado específicamente sobre los soñadores.
El pasado mes de julio, sin embargo, trascendió que el Pentágono estudiaba la cancelación de este programa, según un informe interno al que tuvo acceso el diario The Washington Post.
Fuente: Telemundo. MSN