El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, sobrevive a un intento de destitución en el Parlamento luego de que se lo acusara de ocultar sus vínculos con la constructora brasileña Odebrecht, señalada de pagar sobornos a diversos funcionarios en varios países latinoamericanos.
Una pesquisa encabezada por la oposición revela documentos que muestran que Odebrecht pagó 782.000 dólares hace más de una década a Westfield Capital, la consultora privada del presidente, por asesorías financieras. Algunos de los pagos a su firma privada coinciden con el tiempo en que Kuczynski era ministro de Economía y primer ministro del gobierno del entonces presidente Alejandro Toledo (2001-2006). Él siempre negó haber incurrido en alguna ilegalidad o haber recibido algún soborno.