En la batalla electoral por uno de los dos asientos que concede el estado de la Florida en el Senado de la nación, Rick Scott apuesta por el respaldo de los puertorriqueños, mientras un exgobernador de la isla Pedro Rosselló apoya a Bill Nelson.
“Como senador, Bill Nelson ha abogado incansablemente por el pueblo de la Florida y de Puerto Rico”, señaló el señor Roselló, cuyo hijo, Ricardo Roselló, es el gobernador de la isla y aún no se ha pronunciado al respecto.
“Luego del huracán María”, continuó el exgoberandor, que dirigió las riendas de la isla de 1993 hasta 2001, “el senador Nelson lideró esfuerzos en el Congreso por los puertorriqueños en la isla y en Florida”.
Y continuó: “En temas tan importantes como el cuidado de la salud, la educación y la asistencia necesaria, el senador Nelson ha trabajado en asegurar que los puertorriqueños reciban el mismo trato y las mismas oportunidades que el resto de los ciudadanos estadounidenses”.
Por otra parte, el gobernador Scott ha visitado la isla seis veces desde el paso del huracán que tanto daño ocasionó en Puerto Rico en octubre pasado y asegura que ha procurado más asistencia a la isla ante el presidente Donald Trump.
Hace algo más de un mes el equipo de campaña de Scott se aprestaba a conquistar el voto de los puertorriqueños en la zona de Orlando, con un nuevo aviso político pagado que fue transmitido por los canales de televisión en español en la zona de Orlando y Tampa.
El grupo de simpatizantes de Scott planteaba que “cuando los puertorriqueños necesitaron ayuda”, en referencia a la crisis causada por huracán María, “él fue el primero que dijo presente”.
Scott, como gobernador de la Florida, alude a que ha promovido ciertas ayudas económicas y facilidades para los puertorriqueños damnificados que optaron por instalarse en el estado.
Varios estudios señalan que unas 50.000 personas procedentes de Puerto Rico se han asentado en la Florida y unos 30.000 más podrían hacerlo en los próximos meses.
Acorde a las estadísticas, los puertorriqueños, que tienen derecho a votar en los Estados Unidos, por ser precisamente ciudadanos estadounidenses, usualmente se ponen del lado de los demócratas en los asuntos del estado.
Sin embargo, la mayor incógnita está sobre los hombros del actual gobernador Roselló, quien ha recibido reiteradamente a Scott y le ha agradecido “toda su ayuda”, al mismo tiempo que ha hecho lo mismo con el senador Nelson, cada vez que el legislador floridano ha visitado la isla.
Tal vez lo peor que sucedió estos días fue cuando Scott dijo en Puerto Rico que “no sabía que habría hecho diferente” para atenuar los problemas de la isla, luego de múltiples críticas de que Washington nos respondió al desastre del huracán de la misma manera que habría hecho con un estado de la unión, cuando la isla es territorio libre asociado.
La respuesta fue recibida por muchos, según recogió la prensa en la isla, como falta de voluntad para criticar a la actual administración de la Casa Blanca.
En una encuesta difundida por el portal Político.com, alrededor del 75 % de los puertorriqueños residentes en la Florida, por ciento tiene una buena opinión de Scott, mientras que 18% no. El sondeo se hizo entre 1.000 puertorriqueños en el estado encargado por la Universidad Internacional de Florida.
Los números de Nelson: El 62% lo favorece, el 26% no y el 13% no sabe lo suficiente como para expresar una opinión, según la encuesta. Calculado de otra manera, la calificación de aprobación neta de Scott es del 57% y la de Nelson es del 36% entre los puertorriqueños.
Entonces, el republicano está por delante del demócrata en alrededor de 21 puntos porcentuales en la disputa al escaño al senado.
Fuente: Diario Las Américas y Político.com
