Serena Williams regresó a la gira de la WTA el jueves, tras una ausencia de 14 meses por el nacimiento de su primera hija, y no tuvo mayores problemas para solventar su encuentro inicial en el torneo de Indian Wells.
La estadounidense, 23 veces campeona de torneos majors, se impuso 7-5, 6-3 a la kazaja Zarina Diyas en su duelo correspondiente a la primera ronda.
“Fue increíble”, comentó Williams en la cancha tras el encuentro de hora y media. “Había pasado más de un año y una bebé antes de que yo pudiera jugar. Ahora puedo volver y encontrarla, y eso me emociona”.
Observada desde el graderío por su marido Alexis Ohanian, cofundador del sitio Reddit, Williams logró quebrar el servicio de Diyas en el undécimo game del set inicial.
“¡Vamos!”, gritó Williams para animarse, batiendo un puño en el aire, mientras la multitud la ovacionaba.
Williams dejó en cero a su rival en un game, coronado por un furioso ace a 100 millas (160 kilómetros por hora). Fue el primer juego en que tuvo el saque, y marcó la pauta de lo que sería el duelo.
En cuanto consiguió el primer quiebre, marchó tranquila hacia la victoria.
“Definitivamente no fue fácil”, opinó sin embargo. “Siempre tuvimos sets apretados. Fue una buena actuación, estoy un poco oxidada, pero no importa. Simplemente estoy en este viaje, tratando de hacer lo mejor que pueda”.
También el jueves, la puertorriqueña Mónica Puig remontó un 4-0 en contra en el segundo set y acabó imponiéndose 6-3, 7-6 (3) ante la brasileña Beatriz Hadda Maia para superar la primera ronda.
Puig, actual número 83 del ranking mundial, precisó de un quiebre de servicio para ganar el primer set y de una gran reacción en el segundo, que ganó en un desempate frente a la 59 del escalafón de la WTA.
La vigente campeona olímpica se las verá con la letona Anastasija Sevastova, 21ra cabeza de serie en el torneo que se disputa en superficie dura en el desierto californiano.
Fuente: Agencia AP