¿Puede el tiempo avanzar hacia atrás? A pesar de que a nivel microscópico, donde se encuentran las partículas subatómicas, las leyes de la física son simétricas tanto si el tiempo corre hacia adelante o hacia atrás, a nivel macroscópico todos los procesos tienden a avanzar adelante. En base a esta realidad, el astrónomo británico Arthur Eddington acuñó por primera vez el concepto 'flecha del tiempo'. Una idea que fue utilizada para distinguir una dirección en el tiempo en un universo relativista de cuatro dimensiones.
Desde que Eddington formulara el concepto de la 'flecha del tiempo', los investigadores se han estado preguntando la razón por la que el tiempo apunta únicamente a una sola dirección. Hasta el momento, los investigadores que han estudiado acerca de la 'flecha del tiempo' se apoyaban en la Segunda Ley de la Termodinámica para razonar que el tiempo viaje siempre en una dirección. Una ley que establece que en cualquier proceso cíclico, la entropía (magnitud física) tiende a aumentar o a permanecer igual.
La explicación a la evolución del universo
Los científicos se apoyan, sobre todo, en las condiciones iniciales del universo. Durante su primera etapa, el universo estaba caliente y su energía era distribuida uniformemente. Un estado considerado de baja entropía para un sistema dominado por la gravedad. No obstante, con el tiempo, la entropía ha aumentado continuamente, lo que sirve como explicación para que el tiempo avance en una única dirección.
Debido a las flechas del tiempo, el huevo nunca puede volver a ser crudo una vez frito ni la leche puede separarse de manera limpia y pura del café una vez mezclados. Es decir, las condiciones iniciales de un sistema son fundamentales para su devenir. Casi un siglo después de que Eddington acuñara el término, un equipo internacional de físicos, liderado por Kaonan Micadei, de la Universidad Federal ABC (Brasil) ha intentado modificar las condiciones iniciales de un sistema cerrado para descubrir si pueden invertir la flecha del tiempo.
La hora de ir hacia atrás
El equipo de físicos ha conseguido desarrollar un sistema cerrado cuyas condiciones iniciales obliguen a la flecha del tiempo a apuntar en la dirección opuesta. Es decir, han creado un sistema que les permite observar un objeto frío calentando uno más caliente. En concreto, el equipo ha desarrollado un sistema cerrado a partir de una mezcla de cloroformo disuelto en acetona, tal y como demuestran en su estudio.